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martes, 14 de febrero de 2017

ABECEAGRARIO: BRUCELOSIS BOVINA

Recientemente el caso del indulto de la vaca Carmen, ha causado indignación en no pocos ganaderos, que consideran que a ellos se les aplica con mayor dureza una normativa  destinada a erradicar enfermedades importantes como la brucelosis o la tuberculosis bovina. En el debate que se ha suscitado a menudo se han mezclado estas dos enfermedades, que aunque tienen muchos puntos en común, no son lo mismo ni se transmiten igual. A la tuberculosis bovina ya le he dedicado un ABECEAGRARIO, así que ahora es el turno de la Brucelosis. 
 

¿Qué es la Brucelosis?

La brucelosis es una enfermedad contagiosa del ganado. La produce una familia de bacterias, cada una tiende a especializarse en un animal - Brucella abortus en vacas, B. melitensis en ovejas y cabras y B. suis en cerdos - aunque la mayoría también pueden infectar a otras especies como caballos, camélidos, perros, algunos mamíferos marinos y al ser humano, por lo que se considera una zoonosis.
 

Se trata de una enfermedad muy infecciosa para el ser humano, al que le provoca la fiebre ondulante o fiebre de Malta.
 

La pasteurización de la leche ha sido un gran avance para evitar la infección humana de enfermedades como la tuberculosis y la brucelosis. Es un proceso térmico que somete a la leche a temperaturas próximas a la ebullición para matar a los microbios que pueda contener. Fuente.

En los animales provoca abortos, y problemas de reproducción, lo que se traduce en importantes pérdidas económicas para el ganadero
 


¿Cómo se transmite y propaga?
 

Uno de los problemas de esta enfermedad es que apenas da la cara; la hembra infectada muestra pocos signos clínicos hasta que aborta o pare, momento que la bacteria aprovecha para su dispersión. En los líquidos del parto hay una gran cantidad de bacterias, perfectamente capaces de sobrevivir varios meses fuera del animal y dispuestas a contagiar al desafortunado que las ingiera. También son capaces de colonizar las ubres y contaminar la leche.
 

Veterinarios, granjeros y empleados de  matadero están expuestos a la infección cuando manipulan animales infectados, sobre todo en partos o abortos. Fuente.

La brucelosis es una enfermedad importante en la fauna salvaje y la presencia de reservorios en estos animales complica la lucha por erradicar la enfermedad.
 


¿Cómo se combate en España?
 

Al igual que en el caso de la tuberculosis, se empezó a tomar medidas a principios de los años 50. Con la entrada en la UE se unificó la normativa y en los años noventa se introducen buena parte de las medidas que se aplican en los Programas de erradicación actuales. Desde entonces la enfermedad ha seguido una tendencia de descenso sostenido y el objetivo es erradicarla en poco tiempo.
 

Las medidas de erradicación son similares a las de la tuberculosis: realización de pruebas periódicas, sacrificio de la vaca que dé positivo en las pruebas, medidas de control en las explotaciones, notificación de abortos obligatoria y revisiones mas exhaustivas.
 

En el momento del saneamiento, se extrae sangre a las vacas o en el caso de las lecheras se analiza la leche;  con este material se realiza un análisis preliminar de tipo inmunológico. Si un animal da positivo, se sacrifica inmediatamente y se realizan pruebas de laboratorio más específicas para aislar e identificar a la bacteria. Si se confirma la existencia de la bacteria se procede al vaciado sanitario de toda la explotación.
 

Evolución de la incidencia de la brucelosis en España 2007-2015. Destacan las zonas de dehesa y de pastos de montaña, situaciones en las pueden convivir rebaños de distintas especies o procedencias junto con la fauna silvestre. Para llegar a ver casi todo el territorio verde se han tenido que sacrificar muchas vacas, siempre quedará la duda de donde está el límite entre la precaución que aconseja la ciencia y la posibilidad de arruinar al ganadero. 

 

Para documentarme sobre el tema he recurrido a: 



 

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lunes, 13 de febrero de 2017

ABECEAGRARIO: TUBERCULOSIS BOVINA

Últimamente se ha hablado mucho de la tuberculosis bovina a propósito de la historia de la vaca Carmen: una vaca madrileña que vivía en un santuario de animales que libró de ir al matadero a pesar de dar positivo en una prueba de tuberculosis bovina. Sin embargo, miles de congéneres suyas en el resto de España no han tenido tanta suerte y han tenido que ser sacrificadas, debido a la lucha sin cuartel que se lleva manteniendo desde hace ya mucho tiempo para librar al campo español de esta enfermedad.

Si queréis saber un poco más sobre esta enfermedad y cómo se combate en España, os interesa leer este ABECEAGRARIO. 


¿ Qué es la tuberculosis bovina? 

La tuberculosis bovina (TB) es una enfermedad crónica de los animales provocada por una bacteria llamada Mycobacterium bovis emparentada con las bacterias causantes de las tuberculosis humana (Mycobacterium tuberculosis) y aviar. Puede afectar a prácticamente todos los mamíferos, a los que provoca un deterioro del estado general de salud, muy a menudo tos y, a la larga, la muerte.
 

Aparte de ser una importante enfermedad que afecta al ganado vacuno, a otros animales domésticos (cabras, ovejas, cerdos, caballos, perros, gatos...) y a la fauna salvaje ( zorros, ciervos, gamos, jabalíes, elefantes, tejones, zarigüeyas, linces, etc.), también se considera una zoonosis, es decir que puede transmitirse al ser humano.
 

Ahí donde lo ves, el tejón (Meles meles) un animalillo tan simpático, es la pesadilla de los ganaderos británicos e irlandeses.
 
Hasta los años veinte era una de las principales enfermedades que afectaba a los animales domésticos en todo el mundo, hasta que empezaron a aplicarse medidas de control, como la pasteurización de la leche y los programas de erradicación. Aunque se ha conseguido reducir drásticamente e incluso eliminar la enfermedad en muchos países desarrollados, en otros (EEUU, Canadá, Nueva Zelanda, Reino Unido) todavía persisten bolsas de infección, principalmente debidas a la fauna salvaje.  Sin embargo en países en vías de desarrollo sigue representando un importante lastre, para la producción ganadera y sobre todo para la salud pública, ya que se calcula que afectará a más de un millón de personas en todo el mundo en la próxima década.
La tuberculosis mató a mucha gente en el siglo XIX, por lo que se llamó la enfermedad de los románticos. Este Cuadro "La niña enferma" lo pintó Edvard Munch en 1886. Su madre y su hermana murieron de esa enfermedad. M. bovis estuvo detrás de una proporción considerable de los casos de tuberculosis en humanos en la Europa de finales del siglo XIX y principios del XX.


¿Cómo se transmite y propaga la enfermedad?
 

La tuberculosis es contagiosa y se propaga principalmente a través de la inhalación de las gotículas infectadas que el animal enfermo expulsa al toser. También se puede contraer la enfermedad al consumir leche cruda procedente de vacas enfermas.
 

Así se transmite la tuberculosis.
 
Se trata de una enfermedad de evolución lenta, y pueden pasar meses o incluso años hasta que el animal infectado muere. De esta manera, un solo ejemplar puede transmitir la enfermedad a muchos de sus compañeros del rebaño antes de mostrar los primeros signos clínicos de la enfermedad. También puede ocurrir que la bacteria permanezca en estado latente en el animal hospedador sin llegar a desencadenar la enfermedad.
 

Por esta razón las principales vías de diseminación son el desplazamiento de animales domésticos infectados pero asintomáticos y el contacto con animales salvajes infectados.
 

La utilización de pastos comunales y los movimientos trashumantes implican un riesgo de contagio entre rebaños. Por esa razón ningún animal puede salir de su granja sin su correspondiente guía sanitaria que certifique que está libre de cualquier enfermedad transmisible. En zonas con cierta prevalencia de tuberculosis, al ganado trashumante se le hace un análisis 30 días antes de salir y 30 días después de llegar. Bonita foto de Jesus Blesa, si os gusta la trashumancia no os perdáis el resto.


¿Cómo se combate en España?
 

En España se comenzó a luchar contra la enfermedad a principios de los años 50 y con la entrada en la Unión Europea en 1987 se comienzan a hacer los primeros Planes de Erradicación. Mediante estos planes, los Estados Miembros buscan erradicar completamente la enfermedad.
 

¿Y cómo lo hacen? Principalmente mediante las pruebas diagnósticas que se realizan, cada cierto tiempo a todos los animales de las explotaciones mayores de 6 semanas de edad.

La técnica de rutina que se utiliza es la prueba denominada "intradermotuberculinización" (IDTB) simple, que en ocasiones se complementa con la IDTB comparada y la prueba del interferón gamma. Estas pruebas son las únicas aceptadas oficialmente y sólo las pueden realizar veterinarios formados específicamente para ello. Ninguna de ella es perfecta por sí sola, pero su uso combinado permite detectar la presencia de la bacteria en animales de manera temprana (y así evitar el contagio a sus compañeros de rebaño) o para descartar falsos positivos, menos frecuentes, pero que causan el lógico cabreo entre los ganaderos.
 

La prueba de la tuberculina consiste en inyectar un derivado de M. bovis, normalmente en la piel del cuello. Si el animal ha tenido contacto previo con M. bovis, su sistema inmune provocará una inflamación en el punto de inoculación. Para detectarla se mide el grosor de la piel antes de la inoculación y a las 72 horas. Si se produce inflamación, el grosor aumentará sensiblemente y se considerará positiva. Se trata de una prueba que apenas da falsos positivos, pero sí negativos dudosos, por lo que requiere la interpretación de más datos por parte de los veterinarios. Dependiendo de las circunstancias que rodean al rebaño estos negativos dudosos a veces se consideran como positivos.
 

Esta vaca ha dado positivo en la prueba de la tuberculina. La prueba indica que el animal ha entrado en contacto con la bacteria, y con el tiempo puede acabar desarrollando la enfermedad. Fuente.

Cuando una vaca da positivo en esta prueba se tiene que sacrificar. Y si las autoridades competentes consideran que puede existir un grave riesgo para la salud pública u otra razones sanitarias, se puede ampliar el sacrificio a todos los animales de la explotación, realizando lo que se denomina un vaciado sanitario.  Una vez sacrificada, en el matadero se hacen análisis post-mortem para confirmar la presencia  de la enfermedad y su grado de avance.
 

A la explotación donde haya habido vacas positivas se le aplican una serie de medidas preventivas: control de las instalaciones (bebederos, comederos, camas, estiércol) y de los pastos, un control exhaustivo del movimiento de animales (de salida y entrada) movimientos y la realización de las pruebas diagnósticas cada menos tiempo. Así hasta recuperar su calificación como explotación libre de la enfermedad.
 

Fuentes de información:
 

Programa nacional de erradicación de la tuberculosis bovina 2017
FICHA INFORMATIVA DE LA OIE SOBRE TUBERCULOSIS BOVINA

 

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miércoles, 11 de enero de 2017

ABECEAGRARIO: CABALLÓN

Empezamos el año con fuerza, y pensando en las labores del huerto que nos esperan, nada mejor que un abeceagrario de especial interés para los 'huerteros'.

Un caballón es el montículo de tierra de labor que queda entre surco y surco al arar un terreno, aunque también se puede hacer a propósito con la azada.

 

Este sistema se utilizaba tradicionalmente en los huertos pero ha ido desapareciendo en gran parte debido a la aparición del riego por goteo, ya que una de las funciones principales de los caballones es contener y dirigir el agua cuando se riega a manta. 

De esta manera las plantas se encuentran en alto, sin llegar a encharcar la base del tallo a salvo de pudriciones en las raíces o la base del tallo, pero les llega la humedad sin problemas.  


Detrás de esta sencilla estructura hay más ciencia de la que parece. La idea es asegurarse que el agua que discurre por los surcos sea aprovechada lo máximo posible por las raíces de las plantas que ocupan los caballones.
 

La distancia entre un caballón/surco y otro depende de varios factores: tipo de suelo, tipo de cultivo y maquinaria que se pretende utilizar, entre otros.. Fuente
 
Si el ancho del surco es excesivo, o no llega la suficiente cantidad de agua, esta apenas mojará los flancos de los caballones, donde están las raíces listas para absorberla en cuanto llegue. El agua queda en el fondo del surco y se perderá por percolación (se filtra hacia el interior del suelo) donde, si acaso, la aprovecharán las malas hierbas (dependiendo del celo del hortelano). Si hay demasiada agua o los caballones son bajitos y están muy cercanos entre sí, el agua los sobrepasa y aparecen los problemas de erosión: el caballón se deshace y quedan los tallos o raíces de las plantas al descubierto (lo que las hace más vulnerables). Así que... ¿quien dijo que ser agricultor es fácil? ¡menos mal que se inventó el riego por goteo!. 

 

Dependiendo de la especie a cultivar, esta se puede plantar en la corona, el lomo o el flanco del caballón. El clima y el tipo de suelo determinarán si conviene hacer surcos amplios o caballones pronunciadosFuente.

a) Situación ideal: las raíces tienen acceso total al agua. b) Situación a evitar: el agua no llega a las raíces y se filtra al suelo. Fuente.
 
Una ventaja de los caballones es que los surcos que quedan entre medias nos permiten pisar para acceder fácilmente a las plantas para cuidarlas, observarlas, recoger la cosecha o lo que haga falta. Al no pisar en zona cultivada, la tierra que forma el caballón continuará mullida, lo cual facilita el crecimiento de las plantas.
 

Como ya he apuntado cada vez se utiliza menos, ya que suele implicar regar a manta lo cual consume demasiada agua y no está el clima para excesos. Hoy en día, sobre todo en pequeños huertos (familiares, urbanos, escolares etc) se utiliza más la técnica del bancal profundo, a la que algún día tendremos que dedicarle una entrada.
 

Sin embargo, hay especies con las que interesa utilizar este sistema, como es el caso de la patata. Para cultivar los espárragos o la fresa también se utilizan caballones, pero por otras razones propias de su cultivo. 
 

Los tubérculos de la patata se desarrollan en la tierra mullida del caballón. Cuando llegue el momento de recogerlos, los tubérculos están por encima del nivel del suelo por lo que la cosechadora, en vez de cavar sólo tiene que "desmenuzar" el caballón, lo cual facilita bastante la tarea. Fuente: Blog Mas que máquinas agrícolas.

 


Se pueden hacer a mano o a máquina. Viendo el vídeo parece fácil hacerlas a mano, pero requiere su práctica. 


En este vídeo se hacen con una motoazada a la que se le acopla un apero que forma los caballones.

Por cierto, en inglés se les llama 'ridge'.
 


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lunes, 21 de noviembre de 2016

ABECEAGRARIO: BRÉCOL



También llamado brócoli o bróculi, es una verdura que no suele dejarnos indiferente, o gusta o repele, especialmente a los niños, como estamos comprobando en nuestra nueva visita del "Proyecto Conocer la Agricultura" a colegios valencianos, en la que colabora como patrocinador Sakata Seed.

Brécol, brócoli o bróculi. Fuente: JUMOSOL
Aprovechando que tenía que buscar curiosidades para que los niños no nos mandaran directamente a paseo cuando les habláramos del brécol, he descubierto unas cuantas cosillas que lo mismo os interesan.



Una planta con muchas caras


El brécol es simplemente una variedad de las múltiples que tiene la especie - Brassica olerácea. Simplificando mucho podríamos decir que el brécol (B.oleracea var. italica) es hermano de la coliflor (B. o. var. botrytis),  el repollo (B. o. var. capitata), las coles de bruselas (B. o. var. gemmifera), el "moderno" kale o col rizada (B. o. convar. acephala var. sabellica) y las berzas de toda la vida (B. o. var. viridis). Siguiendo con el símil, sería primo del nabo, la mostaza, los rabanitos, el rábano picante o el wasabi, todos pertenecientes, como el, a la familia de las crucíferas. Esto que os cuento hecho tiene su interés, ya veréis por qué.



El brécol tipico pertenece a la subvariedad "Calabrese" o brécol italiano, también hay brécol morado o de Sicilia, que se vuelve verde durante el cocinado e incluso brécol blanco o de Verona. Fuente: Naukas




Una verdura de tradición mediterránea que alcanza el mundo entero


El brócoli parece ser originario del Próximo Oriente (Asia Menor, Líbano, Siria, etc.), pero si algún pueblo destacó por la afición a esta planta fueron los romanos, que hace más de 2.000 años lo cultivaban y consumían. Hoy en día sigue siendo una verdura muy popular en Italia y toma su nombre de la palabra "brocco" , que significa retoño o brote.


Actualmente el brécol se cultiva en tres zonas importantes del mundo: China, para variar, responsable de casi la mitad de la producción, Estados Unidos donde curiosamente son muy aficionados a esta verdura y Europa.

Según cuentan en la página de Broccoli Pasión de las 75.000 hectáreas cultivadas con brócoli en Europa, 35 000 son españolas.



¿Sabías que el brécol fue introducido en EEUU por los inmigrantes del sur de Italia pero no alcanzó su popularidad hasta los años 20 del siglo pasado?



Eso que te estás comiendo son cientos de (futuras) flores


Al igual que la coliflor, el brécol posee una gran cabeza floral que es la parte que nos comemos. 


En la coliflor las futuras flores están más apiñadas y son muy inmaduras. Las florecillas del brécol, aparte de ser de color verde intenso, son más evidentes aunque también inmaduras y están dispuestas como si fueran las hojas de un arbolito. A todo este conjunto, que es lo que encontramos a la venta se le llama pella.


La estructura del brécol recuerda a un árbol. Las flores están dispuestas al final de ramas que surgen de un tronco grueso (también comestible). Fuente: Roger prat - Own work, CC BY-SA 3.0 / Wikimedia commons


Esas pequeñas flores amarillas de cuatro pétalos le delatan, el brécol es una crucífera. Fuente: Jengod - Own work, GFDL / Wikimedia commons 


Un arsenal químico listo para ahuyentar al enemigo


Según nos cuenta Harold McGee en su libro "La Cocina y los alimentos", la familia de la col comparte con la cebolla algunas partes de un particular sistema defensivo desarrollado para hacer frente a cualquiera que pretenda comérselas.


Al igual que ocurre con las cebollas y los ajos, las coles y muchos de los parientes que mencioné al principio, almacenan dos tipos de sustancias defensivas en sus tejidos: los precursores del sabor y las enzimas que actúan sobre ellos. Cuando las células de la planta se dañan, por ejemplo al cortar la verdura, las dos reservas se juntan y las enzimas inician una cadena de reacciones que produce compuestos aromáticos azufrados; unos amargos, otros picantes y otros de olor fuerte como la coliflor o el brécol. Este peculiar y efectivo sistema defensivo pudo haber inspirado el nombre de su temible versión artificial, el Gas Mostaza, utilizado en la I Guerra Mundial. 


Lo paradójico del asunto es que estas sustancias implicadas en la defensa de la coliflor y demás parientes - los glucosinolatos e isotiocianatos - tienen efectos importantes en el organismo: unos interfieren en el funcionamiento de la glándula tiroides si la dieta es baja en yodo, pero otros (en concreto ciertas sustancias del brécol) ayudan a proteger contra el cáncer, afinando nuestro sistema encargado de eliminar sustancias extrañas.



Un as de oros en la despensa


Aunque no soy muy partidaria de ponerle la etiqueta "super" a ningún alimento, la verdad es que el brécol tendría méritos para llevarla. Aparte de que contribuye a prevenir - ojo, ni cura ni previene por sí solo - determinados tipos de cáncer, se dice de ella que es la hortaliza de mayor valor nutritivo por unidad de peso de producto comestible, ya que contiene un buen abanico de nutrientes: vitamina C, fibra alimentaria, carotenoides, etc.


Pero si quieres incorporarlo a tu dieta y no te gusta su intenso sabor, puedes probar con dos primos hermanos obtenidos por hibridación natural: el romanescu y el bimi.



El asombroso romanesco o romanescu es un híbrido entre el conocido brécol y la exquisita coliflor creado en el Scottish Horticultural Research Institute hace la tira de años. Su sabor es más suave y su textura más crujiente pero posee similares propiedades nutricionales. Fuente: By Jon Sullivan./ Wikimedia Commons.


El Bimi, conocido como Broccolini en América y Tenderstem en Inglaterra, es un cruce entre brócoli y col china o Kai Lan (B.o. var. alboglabra). Desarrollado por la empresa Sakata, es como un brécol que hubiera pegado el estirón de la adolescencia. De sabor más suave y dulce que el brécol, recuerda al espárrago verde en el aspecto y en el sabor.


Consejos para su cultivo


Al igual que hicimos con la zanahoria, termino esta entrada con algunos consejos importantes a la hora de cultivarlo de la mano de la Huertina de Toni.




¿Sabías que el brécol recolectado en otoño e invierno es el más suave?




  • Se siembran en semillero al aire libre en verano. Cuando alcanzan los 10-15 cm se trasplantan dejando un marco de unos 50 cm entre planta y planta. Le viene muy bien el acolchado, ya que permite conservar la humedad y aporta materia orgánica.





  • Tanto el brécol como la col necesitan abundante humedad, eso si el suelo ha de estar bien drenado, y son bastante exigentes en nutrientes, especialmente potasio y nitrógeno.





  • Son plantas de crecimiento lento. Se recolectan a partir de los tres meses.
  • Como al resto de brasicáceas, la mariposa blanca de la col (Pieris rapae) es un enemigo común que puede llegar a ser devastador. La forma más efectiva de tratarlos es con insecticida, ecológico (basado en toxina Bt) o no ya va por gustos.



Si ves a esta mariposa revolotear por tu huerto, ándate con cuidado porque te puede dejar sin cosecha de brasicáceas.Fuente: Lesley Ingram, Bugwood.org

A esta planta de brécol, la larva de la mariposa le ha dejado las hojas como un colador. Fuente: Whitney Cranshaw, Colorado State University, Bugwood.org






Ah, y si quieres escribir esta palabra en inglés no te olvides de ponerle una "c" extra : broccoli.




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