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viernes, 7 de febrero de 2020

MÁS FELIZ QUE UN COCHINO EN MONTANERA

No sé si realmente existe esta expresión, o simplemente fue invención de Juan Echanove en el programa de "Un país para comérselo" que dedicaron a Extremadura. En todo caso, desde hace tiempo forma parte de mi colección de dichos, y además me va a servir para contaros en qué consiste eso de "la montanera" y ya de paso para explicar unas cuantas cosillas que ayuden a entender el etiquetado de los productos de cerdo ibérico.
 

El cerdo ibérico y la dehesa, algo muy nuestro
 

Según cuentan los apuntes de la universidad de Córdoba los celtas y su cultura pastoril nos legaron el sistema de crianza del cerdo en bosques de Quercus (robles, quejigos, encinas, alcornoques...), que en el oeste de la Península Ibérica dio lugar a las dehesas. Aunque también aprovechan sus recursos vacas y ovejas, se puede decir que el cerdo ibérico y la dehesa forman un binomio inseparable. 

 

La dehesa es un ecosistema único, que compartimos con nuestros vecinos portugueses. Fuente: Carlos G. Hdez. Díaz - Ambrona / Editorial Agrícola.


 

El cerdo ibérico es una raza autóctona, compuesta su vez por varias líneas o variedades, que ha sido seleccionada a lo largo de los siglos por su capacidad para aprovechar al máximo los recursos naturales de la dehesa y soportar las difíciles condiciones ambientales de ese ecosistema. Se trata de un cerdo algo más pequeño que sus hermanos "de capa blanca" (los cerdos rosas de toda la vida), que crece más lentamente y tiene una mayor tendencia a acumular grasa dentro y fuera de sus músculos. Todas estas características lo pusieron al borde de la extinción cuando entró en escena el cerdo magro de crecimiento rápido que actualmente se utilizan en la cría intensiva.
 

 

Para una buena montanera hacen falta bellota y pasto
 

La montanera es la época del año en la que encinas y alcornoques producen las preciadas bellotas. Depende bastante del clima, pero suele comenzar a finales de octubre y se mantiene hasta finales de febrero. Durante todo ese tiempo, las piaras de cerdos adultos se mueven por la dehesa comiendo todo lo que pillan, que básicamente es bellota y hierba. Se suele estimar que el cerdo "engorda" un 1 kg de peso por cada 8 a 10 kg de bellotas fresca que consumen. Aunque no está permitido en la normativa, en determinadas circunstancias los cerdos de bellota pueden recibir una ligera suplementación con pienso, llamada "postre", que ayuda a engordar al cerdo con un poquito menos de bellotas.
 

¿Sabías que un cerdo en el campo puede comer de 7 a 10 kilos de bellota diarias? Según la cantidad de árboles, del clima y de cómo vengan cargado de bellotas (las encinas son árboles "veceros"), cada temporada hay que ajustar la carga ganadera, es decir el numero de cochinos por hectárea.


Un año y una dehesa con buena producción de fruto admite una densidad óptima en torno a 1 - 1.5 cerdos por hectárea. Los cerdos también pueden aprovechar la hierba o los restos de cultivos. Fuente: Adoración Luna/ Editorial Agrícola.


Durante todo este tiempo los animales tienen que tener acceso libre y fácil al agua y al pasto; eso significa que el ganadero depende de la climatología, si no llueve apenas hay hierba, se secan los regatos e incluso los pozos lo cual puede retrasar el inicio de montanera. La hierba también es importante, porque el cerdo necesita una ración de "ensalada" que equilibre la dieta.

El porquero que sale en "un país para comérselo" explica que la dehesa tiene que tener hierba, "para que la boca no se les foguee" a los cerdos. Ignoro qué significa exactamente eso de foguearse (o calentarse) la boca en términos veterinarios; lo que sí he podido averiguar es que la hierba joven de otoño es muy rica en proteínas, mientras que la bellota aporta principalmente energía y ácidos grasos monoinsaturados. La hierba además tiene un importante papel a la hora de mantener el tono blanco característico de las vetas de grasa en la carne ya curada. Esto se debe a su alto contenido en gamma tocoferol en forma libre (que se absorbe más fácilmente que las formas análogas incluidas como aditivos en los piensos), al que se unen carotenos, polifenoles, aceites esenciales  - y los taninos de la bellotas.
 

¿Sabías que la hierba en las dehesas anima al cerdo a comer más y contribuye a mantener la grasa blanca en los productos durante todo el proceso de curación?.  

 

Un manejo del cerdo que solo los ganaderos saben hacer

Y es que esto de la montanera no es tan sencillo como soltar a los cerdos a pastar al campo y recogerlos a los cuatro meses. En primer lugar, alguien tiene que encargarse de tirar las bellotas al suelo, ya que los cerdos ibéricos por muy rústicos que sean, ni trepan ni vuelan. De hecho, son más bien vaguetes y el porquero les conduce los primeros días a las zonas más alejadas o con menor densidad de arbolado. De esta manera, al final del la montanera cuando ya están bien hermosos y con pocas ganas de darse paseos, tienen las bellotas a mano (a hocico más bien) . Pero, la labor del porquero no acaba ahí: tiene que reconocer cuándo hay que cambiar de cercado a los cerdos porque están aburridos, cuándo y cómo obligarles a buscar las encinas con bellotas e incluso a hacer cierto ejercicio diario. Recordad que el hecho de moverse de aquí para allá favorecerá la infiltración de grasa dentro de los músculos, característica de esta raza.

 

La bellota, ese ansiado manjar. Y no solo se lo comen los cerdos, también aporta energía a otros animales, tanto silvestres como domésticos.

   

Vayamos al grano, ¿qué producto es mejor?
 

Tenemos que tener en cuenta dos variables fundamentales: la alimentación que recibe el cerdo y su genética. Según la alimentación que haya recibido, sobre todo al final de su vida, tenemos tres categorías: de bellota, de cebo de campo y de cebo de pienso. Según su pureza racial tenemos: ibérico puro, 75 % y 50 % ibérico (el porcentaje indica la cantidad de "apellidos ibéricos" que tendría el cerdo).
 

Aunque en el mercado podrían existir todas las combinaciones posibles de estas seis categorías, en la práctica se reducen bastante. Normalmente se reserva el aprovechamiento de los recursos de la dehesa a aquellos animales con mayor capacidad de producir un alimento "gourmet" y para el resto se recurre a una serie de atajos de manera que más gente pueda acceder a este tipo de productos. Pero como le pasó a Caperucita, a veces los atajos tienen sus inconvenientes, y no falta quien pretende confundir al personal con imágenes o palabras que sugieren una calidad muy alejada de lo que quieren vender. 

Así que, una vez explicada la importancia de la montanera, creo que entenderéis mejor qué significan los términos que se utilizan para denominar estos productos según establece la normativa al respecto. Y así podréis comprar el que mejor se ajuste a vuestras preferencias y presupuesto, pero esta vez, espero, sabiendo mejor lo que os lleváis a casa.

 
Los jamones tienen colocado cerca de la pezuña un precinto que puede ser de cuatro colores: blanco, verde, rojo y negro. Cada uno representa una tipología de producción, de mayor a menor calidad son las siguientes:
 

Negro: jamón de bellota 100% ibérico. El fetén, lo más de lo más. Solo animales de raza ibérica pura y alimentados exclusivamente a base de bellota y hierba durante el periodo de montanera (no durante toda su vida, eso es imposible). ¿Que por qué es el más caro? porque hace falta más tiempo y más hectáreas de dehesa para producir menos cantidad de carne que con el resto de posibilidades. Y eso hay que pagarlo.


El cerdo entra en la montanera con 8-10 @ y es sacrificado con 12-16 @. Este periodo acumulan básicamente grasa (subcutánea, visceral e intramuscular), muy poquita dentro de los músculos, pero ¡ay amigos! lo suficiente para condicionar la calidad del producto final. Fuente: Adoración Luna/ Editorial Agrícola.

Rojo: jamón de bellota ibérico. También caro, pero menos. Aquí admite que el cerdo no sea de raza pura; lo habitual es que sea 75%, pero en cualquier caso, en la etiqueta tiene que figurar el porcentaje. La alimentación es igual que en el caso anterior. Considerando que lo que coma el cerdo es el factor fundamental y que normalmente se cruzan con la raza Duroc (que tampoco está tan mal), creo que la opción roja es bastante interesante si tienes un presupuesto holgado.


 
¿ Sabías que la expresión "Pata negra" queda reservada exclusivamente a los productos de "de bellota 100% ibérico"? ¿y que las palabras "dehesa" o "montanera", solo se pueden utilizar con la categoría "de bellota" ?
 
Verde: jamón de cebo de campo ibérico. Aquí el precio baja sensiblemente ya que bajan bastante las exigencias. El cerdo no tienen por qué ser de pura raza y su dieta básica hasta el sacrificio es el pienso, que contiene sobre todo cereales y leguminosas. La parte buena es que, al criarse obligatoriamente en explotaciones extensivas o intensivas al aire libre ha podido comer bellota y hierba, y ya hemos visto que esto aporta un plus en la calidad final. Antiguamente existía la denominación "de recebo", que se refería a los cerdos que se les daba una ayuda en forma de pienso (algo más que un "postre") durante la montanera para que llegaran al peso de sacrificio estipulado. Ya no se puede utilizar, pero estaría dentro de esta categoría. Esta categoría es, en mi opinión la mejor para darse un homenaje cuando tienes un presupuesto ajustado.
 

Blanco: jamón de cebo. Así, a secas. Algún nombre habría que ponerle a la categoría en la que ni el cerdo tiene porqué ser puro, de hecho lo habitual es que sea mitad ibérico mitad Duroc, ni ha pisado el campo en su vida. Vive en explotaciones intensivas y ha sido alimentado sólo a base de pienso. Aunque también hay que decir que estos piensos cada vez son más equilibrados y producen canales y piezas de una calidad bastante aceptable. ¿Mejor que un jamón serrano de cerdo blanco? pues dependerá del productor, ya que dentro de la producción industrial o intensiva, también hay mucho margen de maniobra para sacar productos interesantes.
 

Aquí tenéis el resumen visual de lo contado.
 
Y para terminar
 

Espero haber ayudado con esta entrada a mostrar la importancia de un producto tan singular y tan nuestro. Y ya que el cerdo fue feliz, andando de aquí para allá, hociqueando y comiendo las bellotas y el pasto que encontraba por la dehesa, ¿por qué no honrar su muerte disfrutando a tope con las viandas que nos ofrece?.

Buen provecho y hasta la próxima.
 


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viernes, 12 de mayo de 2017

CENCERROS, EL CARILLÓN DEL CAMPO

Mira este video y escucha el sonido. Un paisaje sonoro tremendamente evocador y me temo que cada vez más extraño para mucha gente. Producido por un humilde objeto que, aunque no lo creáis, desde 2015 está considerado por la Unesco como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.

 



Y es que, aunque suelo hablar más de ganadería moderna, - las pulseras de actividad para vacas por ejemplo - de vez en cuando me gusta recordar usos y costumbres que aún forman parte de nuestro patrimonio cultural. 


¿Qué es un cencerro?


Según la RAE, una "campana pequeña y cilíndrica, tosca por lo común, hecha con chapa de hierro o de cobre, que se usa para el ganado y suele atarse al pescuezo de las reses".
 Los hay de diferentes tamaños, formas y sonidos, según el animal que los vaya a llevar. Eso sin contar con que cada región tiene sus variantes con sus respectivos nombres. 

Cecerro de carnero. Fuente: Museo de agricultura de Torremocha del Jarama.
Un cencerro es mucho más que una chapa de hierro moldeada con un martillo para darle forma de campana. Necesita pasar por el horno, junto con unas pequeñas láminas de cobre o estaño, que al fundirse recubren la pieza y le dan su sonoridad característica. En este vídeo lo explican muy bien. 

Obviamente, para que suene el cencerro hay que colocarle el badajo. Elaborado con maderas duras, como la encina o la retama blanca, aunque también los hay de hueso, cuerno o incluso de plástico los más modernos.
 

La última tarea es el afinado, en el que se da a cada cencerro su sonido característico con unos certeros martillazos. El conjunto de cencerros que lleva un rebaño entero se llama alambre, y si el afinador hace bien su trabajo el resultado sonoro se parece más a un carrillón que a una cacerolada.
¿Sabías que los cencerros también se afinan?

Clases de cencerros

Los hay de muchas clases, en función de su tamaño, forma y grosor de la chapa. Estos tres factores influyen en el sonido final. A mayor tamaño y chapa más gruesa el sonido es más grave y se oye con más facilidad a larga distancias.


Los hay pequeñitos, las esquilas, para tener controlados a los perros de caza.
 

Los de ovejas y cabras son pequeños o medianos, dependiendo de si el animal que lo ejerce de guía o es una más del rebaño. Pueden ser cencerros o cencerras, changarros, esquilas, o trucos.
 

 Los cencerros para ovejas son más estrechos por abajo; así suenan con más facilidad y compensa el hecho de que la oveja se mueva menos. Como las cabras son  más movidas llevan cencerros de boca ancha, parecidos a los de las vacas. Fuente: Cencerrería Los Tres Golpes 

 

Los cencerros del ganado mayor, vacas y caballos, suelen ser más grandes, sobre todo si el portador es el encargado de guiar a sus congéneres. Los cabestros de las plazas de toros o las yeguas o mulas que van delante de una recua suelen llevar arrancaderas o zumbas. Los cañones, piquetes y cencerros son progresivamente más pequeños. 

Cabestros o mansos con sus zumbas al cuello

 

¿Para qué se utiliza?

El sonido del cencerro permite al ganadero localizar a sus animales, lo cual resulta especialmente útil cuando estos pastan en fincas grandes o en terrenos escarpados.

 También le sirve para identificar a sus animales, gracias al sonido distintivo de cada cencerro. Algo muy importante durante la transhumancia, en el que se mezclan rebaños de diferentes dueños. Cada uno sabe por dónde anda su oveja o su vaca guía por el sonido del cencerro.

Los cencerros también permiten a los animales localizarse entre ellos. Cuentan en este artículo cómo antiguamente, cuando se aproximaba la celebración de una feria ganadera, en los cortijos se acostumbraba a los animales que iban a ser vendidos al sonido de una zumba que portaba una yegua mansa y experimentada, la "madrina". De esta manera, a pesar del jaleo, los animales no se perdían, les bastaba con oír el gran cencerro de la madrina para permanecer junto a los suyos.

 

Mi suegro le pone el cencerro a las vacas con más malas pulgas, de esta manera el resto puede oírlas cuando se acercan y así evitar problemas.


 

Dichos y refranes en torno al cencerro

Todos conocemos y seguro que hemos usado la expresión, "estar como un cencerro", para referirnos a alguien que le falta un tornillo, está chiflado o majareta. 

¿Y si os digo que fulanito estuvo desviando fondos "a cencerros tapados"? Esta expresión, que da a entender que algo se hace callada y cautelosamente, tiene su origen en la costumbre de rellenar los cencerros con hierbas o barro, para que no sonaran cuando el ganado entraba a comer en sementeras o pastos ajenos, donde no serían bien recibidos.

A los aficionados al cine de Pedro Almodóvar seguro que les suena eso de "estar como vaca sin cencerro" , que es lo que le pasaba a Chus Lampreave y Marisa Paredes en "La flor de mi secreto", estaban desorientadas, inseguras, sin saber qué hacer o a donde ir.

Sin salir del mundo rural, antiguamente en muchos pueblos existía la costumbre de “dar la cencerrada” en la que se incordiaba en su noche de bodas a las parejas con gran diferencia de edad o a viudos y viudas que volvían a casarse. 

Tampoco faltan los refranes: “a buey viejo, cencerro nuevo”, "El buey sin cencerro, piérdese presto" o “Amor, tos y dinero llevan cencerro”, o "Échate al cuello un cencerro y te seguirá todo el pueblo". Os animo a explicar su significado en los comentarios.
 

También, cómo no, hay adivinanzas, que pienso hacerle a los niños en cuanto llevemos el Proyecto Conocer a los coles, a ver qué ocurre.
 

Adivina, adivinanza,
 va al monte y no come;
 va al río y no bebe
y con el cántico, se mantiene.

Tamaño como un pepino,
 da voces por el camino
¿qué es?.


¿A que no os imaginabais que un simple cencerro diera para tanto?.
 

Actualización (14/04/2020): durante esta dichosa pandemia de coronavirus, me he enterado gracias a gente estupenda de Twitter que hay pastores que están quitándole los cencerros a sus animales como forma de duelo por todos los que están muriendo estos días. Al parecer, cuando moría un pastor se le quitaban los cencerros a los animales ya que de alguna manera era el rebaño quien guardaba el luto a la muerte del pastor. Me ha parecido una iniciativa curiosa, muy humana y que tenía que compartir.
 





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miércoles, 25 de enero de 2017

NIÑOS, TECNOLOGÍA Y AGRICULTURA

¿Quién me iba a decir a mí que iba a comprar una hamburguesa en un panel digital, utilizando unas ofertas que me llegan al móvil y pagando con una tarjeta contactless?
 
Y es que la tecnología lo invade todo, poquito a poco, pero lo hace. Y al campo también llega, como ya he contado en alguna ocasión.
 

Hay tantísimas posibilidades de aplicar la tecnología en el campo y esta va tan rápido que es fácil perderse. Algunos ejemplos llamativos son la conducción de tractores sin piloto, los sensores en cultivos que miden temperatura, humedad e incluso presencia de esporas de hongos patógenos, drones que fumigan, podan o fotografían cultivos, robots que ordeñan o cosechan fresas....

Muchas de las nuevas tecnologías están ya aplicándose en mayor o menor medida; con el tiempo irán perfeccionándose y desarrollándose otras nuevas que cubran las necesidades que vayan surgiendo.
 
¿Te imaginas manejar un tractor desde una tablet? Pues ya es posible. El  Sistema de Posicionamiento Global (GPS) , permite conducir un tractor a distancia con total precisión,  permite comprobar el estado de la futura cosecha  y para localizar problemas (falta o exceso de nutrientes, de agua, etc).  Incluso se utiliza para crear laberintos de maíz con los que atraer visitantes a la granja (y ganarse un dinerillo extra). Fuente: Case IH.
 
Visto lo visto, las nuevas generaciones que se incorporen al campo tendrán que estar familiarizados con todos estos nuevos avances, aunque no creo que les resulte difícil, viendo la soltura con que manejan móviles y ordenadores unos críos de siete años.
 
Pero como la tecnología y sus infinitas aplicaciones van mucho más allá que dominar el móvil o los videojuegos, el Colegio de Ingenieros Agrónomos de Centro y Canarias ha desarrollado unas Jornadas Tecnológicas dirigidas a los hijos y nietos de colegiados de entre 6 y 12 años. Estas jornadas se celebraron los días 17 de diciembre, 3 y 4 de enero y han tenido un gran éxito.
 
En estas Jornadas Tecnológicas, el colegio quería acercar a los participantes el mundo de la tecnología, la ingeniería y sus aplicaciones de una forma divertida y amena. Para ello prepararon cinco actividades por las que pasaron todos los participantes: Realidad Virtual, Realidad Aumentada, Drones, Lego Robotix y Ardublock. Todas tremendamente interesantes para los padres, aunque los niños (al menos mis hijos) tenían claro cuáles eran sus favoritas: la realidad virtual y los drones.
 
En la actividad de Realidad Virtual los asistentes pudieron conocer cómo, a través de estas tecnologías se pueden crear escenas y objetos de apariencia real.


En la sala de drones pudieron conocer qué tipo de drones existen, para qué se utilizan y cómo funcionan. Los niños manejaron diferentes modelos según su edad. Fuente: COIACC  


Los drones en agricultura pueden tener muchos usos: aplicación de tratamientos fitosanitarios, lucha contra las malas hierbas o determinar el mejor momento para vendimiar 


Primero se construye el robot....

Y luego se le ponen los sensores...No se hizo realmente así, (por limitaciones de tiempo y edad de los participantes) pero la intención de los organizadores era que los niños descubrieran las posibilidades de la tecnología y su aplicación al campo. Fuente: COIACC


En la actividad realizada con Lego Robotix a los niños se les mostró cómo realizar un modelo que funciona automáticamente mediante un sistema motorizado. También descubrieron sistemas de programación sencillos con ArduinoArdublock con los que comprender cómo trabajan sistemas de control de diversos parámetros (humedad, luminosidad, movimiento, pH, etc.) que se aplican hoy en día en agricultura.
 
La cajita puede medir hasta 14 parámetros diferentes relativos al clima, las plantas y el suelo. Los datos enviados pasan a "la nube" y junto con muchos otros, se muestran en una aplicación que ayuda al agricultor a tomar decisiones (cuándo regar, aplicar productos fitosanitarios, cosechar, etc). Fuente:Bynse

 
En la actividad de Realidad Aumentada, los niños consiguieron crear una realidad visual generada por tecnología a partir de una secuencia de imágenes tomadas por ellos mismos.

 
Parece cosa de película de ciencia ficción, pero se han diseñado unas vallas virtuales para controlar el ganado. Las vacas (esos puntos rojos y verdes) al acercarse al vallado invisible, que está controlado por satélite, recibirá un electro-estímulo de su pendiente que hará que se mantenga dentro del cercado. La ventaja, el vallado puede moverse a lo largo del territorio en busca de los pastos que estén mejor en ese momento sin necesidad de levantar el vallado o trasladar al ganado continuamente de una zona a otra. Visto aquí

 
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viernes, 16 de diciembre de 2016

¿PULSERAS DE ACTIVIDAD PARA VACAS LECHERAS?

Si, existen, estos "wearables" que están tan de moda ahora básicamente son podómetros, ¿pero entonces, son para que las vacas pierdan esos kilitos que le sobran?.

No, en absoluto, de hecho a las vacas de leche no suele sobrarles ni un solo kilo. Entonces ¿para qué?. Se lo hemos preguntado a una usuaria, la vaca Margarita, y esto es lo que nos ha contado.


Como puedes ver no me sobra ni un gramo de grasa, toda se va a la leche; pero no te preocupes, es normal y estoy sana como una manzana.


Vigilada a todas horas


Jamás he pensado convertirme en "runner", ni siquiera hacer 10.000 pasos todos los días porque me veo estupenda. Tampoco necesito saber si duermo mucho o poco, o cómo duermo; en mi cubículo de serrín se descansa de maravilla.


De hecho, lo de llevar podómetro ni siquiera fue idea mía. Se le ocurrió a Pedro, el ganadero, ese señor que nos cuida todos los días, ¿o fue al veterinario?, ¡ qué más da!.


El caso es que desde hace ya más de un año llevamos una pulsera en una pata. Al principio se nos hacía un poco raro. Encima todas el mismo modelo, jolines, ya puestos a llevar complementos de moda nos gusta marcar nuestra "vaconalidad"; pero nada, tendremos que conformarnos con nuestras manchas. De todas maneras, al final, entre lo discreta que es, que enseguida se mancha de porquería y que tampoco aprieta ni molesta, pues ni te acuerdas de que la llevas.


Eso que lleva mi amiga en la pata es el podómetro.

¿Sabías que el patrón de manchas de una vaca frisona es único en cada animal?


¿Que por qué la llevamos? De eso sí que me acuerdo, porque al principio no me hizo ninguna gracia. Eso de estar vigilada continuamente no suele gustar a nadie, sobre todo si lo que quieren es controlar tu vida sexual. Me explico.


No sé cómo mostráis el celo los humanos, pero nosotras nos volvemos más inquietas. andamos de aquí para allá a ver si podemos tirarle los trastos al único toro (¡¡ manda narices !!) de toda la granja. Nos volvemos más comunicativas, mugiendo nuestros problemas a quien quiera escucharnos, más cariñosas, dando lametones a las compañeras, o más picajosas, según nos dé. En esos días nos da por montar a nuestras compañeras, y por dejarnos montar; no os escandalicéis, simplemente es nuestra manera de comunicar al resto del rebaño que estamos "on fire". La pena es que en nuestra granja (y en casi todas las que conozco) lo que se lleva es la inseminación artificial, el toro, cuando existe, lo reservan para las nuevas o para las que la dichosa inseminación no les funciona.


El caso es que, con toro o sin él, el jefe necesita saber con seguridad si estamos "en esos días", para que quedemos embarazadas cuando nos toque, porque si se pasa la oportunidad (que dura poco) hay que esperar unos veinte días más, y eso para el ganadero son veinte días perdidos, o al menos eso es lo que él dice. Y el cacharrito dichoso se lo chiva todo; normal, si cuando estamos en celo caminamos dos veces más de lo normal, resulta fácil detectarlo.


Pensareis ¿y es que no tiene ojos en la cara para ver que sus vacas se comportan raro?. Pues eso también lo decíamos nosotras al principio, pero es que somos muchas, y bastantes cosas tiene en la cabeza nuestro Perico para acordarse de lo que hacemos o dejamos de hacer cada una de nosotras. Un día le oí comentar a un vecino que el cacharrito este se comunica con la sala de ordeño, y con su ordenador portátil, y que así puede controlarnos a todas tranquilamente desde casa. Desde que lo tiene prácticamente no nos libramos ni una de la inseminación, una pena porque al final a lo tonto nos juntábamos con unos días extra de vacaciones.


Cuando vamos a ordeñarnos, si estamos en celo se enciende una lucecita (ver óvalo naranja) que dice que estamos enamoradas, ¡ que poético !.
 
 
Estar vigilada también tiene sus ventajas

La verdad, esto me parece cosa de magia, pero bueno, al final le acabas viendo alguna ventajas al podómetro este. Y es que aparte de detectar celos, avisa si a alguna de nosotras le pasa algo raro. Lo cual resulta particularmente útil cuando vives en una granja muy grande o si eres de las afortunadas que pasa el día en el campo. El otro día, sin ir más lejos, mi amiga Matilda se levantó con fiebre, ya sabes cómo se te pone el cuerpo cuando tienes unas decimillas, vamos que no tenía muchas ganas de moverse, lo justo para comer y beber. Antes de que terminara el día, el jefe fue directo a su corral, la buscó y se la llevó a enfermería (si, tenemos enfermería en las granjas de leche, ¿qué te creías?). Antes, hasta que el ganadero o su ayudante no hubiera revisado visualmente todos los corrales con todas sus vacas podían pasar uno o dos días hasta que se diera cuenta.

Vamos, que te sientes hasta más segura, o si no que se lo digan a mi colega Maruxa, de la granja "Casa Xanceda"  donde les sirve también para controlar al lobo (nosotras también nos comunicamos, es nuestra magia particular y no pienso desvelarla a ningún humano).

Nosotras, las vacas, tenemos un olfato muy desarrollado, y cuando un lobo se acerca a menos de 9 km somos capaces de detectarlo. Y nos ponemos nerviosas, claro, y empezamos a andar de aquí para allá. En Xanceda tienen a los burros, los perros y una valla de protección para evitar ataques, pero los podómetros también cumplen su papel: muestra cómo todas las vacas de la manada de repente se mueven mucho, una noche tras otra. Es momento entonces para darse unos paseos nocturnos por el monte con la radio y las luches del coche a todo trapo, para hacerle ver al lobo que casi haría mejor si se larga a cazar a otro lado.


¿Sabías que la vaca es el cuarto animal con mayor capacidad olfativa dentro del reino animal?


Bueno, que ya me he enrollado mucho. Otro día, si os parece, os cuento otra cosa, ahora voy recostarme y rumiar un rato. Hasta pronto.

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martes, 2 de diciembre de 2014

¿SABÍAS QUE LA LECHE NO ES UN VENENO?



Seguro que de una manera u otra os ha llegado la típica historia de Internet, que no tiene ni padre ni madre pero que circula de maravilla porque tiene los ingredientes básicos para hacerlo: información sobre alimentos + morbo +  cierta conspiranoia + solución milagrosa. Se trata de “los cinco venenos blancos”.


Uno de ellos es la leche. Y en Cosmopolitan tv le dedican un artículo que "sí que es la leche", concretamente una sarta de locuras aderezada con verdades pelín dramatizadas, artículo que lógicamente tenía que rebatir. Así que voy a explicaros por qué la leche no es un veneno, desmontando uno a uno los hilarantes argumentos:

¿Venenosas nosotras?


Comencemos por la primera afirmación: “Somos el único animal que sigue tomando leche de adultos y encima ¡¡¡DE OTRA ESPECIE!! A nivel biológico es una aberración. Este manido argumento, al que le ha faltado añadir algo así como que “los chinos no toman leche y les va estupendamente”, puede que tenga algo de verdad, pero dicho así suena muy fuerte. 


En temas de nutrición prefiero recomendaros dos estupendas entradas del Nutricionista de la General: una sobre mantener el consumo de leche toda la vida  y otra sobre la intolerancia a la lactosa, trastorno genético que consiste en la pérdida a la edad adulta de la capacidad de fabricar una enzima, la lactasa, encargada de romper el azúcar de la leche (la lactosa),  y por tanto de digerir bien la leche. Y que, mucho me temo, está generando una moda anti-lactosa similar a la del gluten.


El hábito de tomar leche y la capacidad para digerirla tiene una explicación evolutiva.  En muchas partes del mundo la población posee algún grado de intolerancia a la lactosa, lo cual no les suele suponer mucho problema porque habitualmente no consumen leche (y no les pasa nada). Sin embargo, en el norte y centro de Europa, zonas donde la ganadería ha tenido una importancia crucial en la alimentación de la población, el porcentaje de personas que pueden tomarse su "relaxing cup of café con leche" sin problemas digestivos es significativamente menor. De todas maneras un 54 % en España me parece demasiada gente, ¿qué opináis? Fuente: www.lactosa.org




Ahora vamos con “los procesos actuales de extracción de la leche de vaca; que son para tomarlos con pinzas. Así, sin más, afirman que se las estresa médicamente  con clembuterol y diversos medicamentos”. 


  • ¿Pero no estamos hablando de vacas lecheras? El CLEMBUTEROL U OTRAS HORMONAS DEL CRECIMIENTO, se utilizarían para el engorde de terneros, peeero ESTÁN PROHIBIDAS en la Unión Europea, salvo por prescripción veterinaria, como ya conté en esta entrada
  •  ¿Podrían especificar a que “diversos medicamentos” se refieren?  A lo mejor se han documentado y estaban pensando en la oxitocina. Esta hormona a veces se utiliza para favorecer la bajada de la leche, por ejemplo cuando la vaca está nerviosa. Esto no suele ser necesario con un buen manejo de los animales y por tanto no es la norma, ya que no resulta práctico pinchar todos los días dos veces pongamos a 20, 100 o 500 vacas. Además, administrar oxitocina si que es una práctica corriente, que además causa un estrés importante, en los paritorios humanos y eso parece que lo tenemos asumido
No contentos con esto también afirman que se las estresa mecánicamente. Ya me imaginaba yo a la pobre vaca en un potro de torturas medieval, cuando aclaran simplemente que se trata de “fogonazos de luz artificial cada 4  horas para que se pongan a producir”, entre otras ideas que ahora comento.

  • En España, los cubículos de las vacas suelen estar en establos grandes, normalmente abiertos y al aire. Lógicamente en zonas donde los inviernos son de aupa si que están cerrados. Así que vosotros me diréis como diantres se les pueden dar fogonazos de luz, ¿quizá en la cámara secreta de las torturas de la vaquería?. Ni siquiera a las gallinas, animales en los que sí se utilizan ciclos de luz-oscuridad (para simular el día y la noche), se les dan fogonazos, porque directamente también ESTÁ PROHIBIDO
Por fogonazo sólo me viene esto.
  •  ¿Qué entienden exactamente por “hacinamiento”?. Cada vaca tiene su cubículo, relleno con arena o incluso una especie de colchoneta, que se mantiene siempre limpio; yo a esto no lo veo hacinamiento. Para hacinamiento tenemos el metro en hora punta o las calles comerciales en plena euforia consumista navideña. 

Estos son los cubículos en una granja moderna estándar. Vale que no son "king size" pero tampoco están mal, ¿no?.


Y a falta de árbol para rascarse, buenos son estos cepillos.


  • ¿Y por “estabulación”?  A lo mejor alguien todavía piensa que “lo natural” es que la vaquera vaya alegremente por el prado en busca de la vaca, con su banquetita y su cubo, la ordeña a mano, lleva la leche a la vaquería y vuelta al prado a ordeñar la siguiente. Algo poco práctico. Es cierto que las granjas no tienen por qué tener necesariamente acceso a prados, pero lo habitual es que tengan amplios corrales en los que moverse con libertad.

En las salas de ordeño se pueden ordeñar varias vacas a la vez de una manera cómoda, rápida e higiénica. Al fondo se ve cómo las que faltan por ordeñar esperan su turno pacientemente.


  •  La separación de sus crías”, esto sí que es cierto en la producción de leche actual, pero como estrés mecánico no lo veo. Las vacas de leche se crían para que nos den leche a nosotros y las de carne para que alimenten a sus terneros, que también nos los comeremos nosotros. Ningún ganadero va a tener a sus vacas dando de mamar a los terneros durante – ¿1, 2, 3 meses? de los diez que dura el ciclo de lactación– cuando de lo que viven es, precisamente, de vender leche. De todas maneras sí que se les da a los terneros recién nacidos el calostro de sus madres para aportarles inmunidad.

No están con su mamá pero tampoco están solitos


  • Miedo me da pensar en los “métodos forzosos de procreación” ,¿será que todo establo cuenta con un malvado toro acosador?, ¿se referirán quizás a esa manía del veterinario o ganadero en meterle mano a las vacas sin consultarlas siquiera o sin hacerles unos mimitos previos?. Aunque no es raro que se tenga un toro en la granja, efectivamente en la actualidad se suele recurrir a la inseminación artificial por varios motivos que no voy a entretenerme en explicar para no aburriros (pero estaría encantada de explicarlo en los comentarios si queréis).

Todo este supuesto estrés mecánico “les produce unas mastitis horribles que luego hay que curar con antibióticos”. Esto ya es de traca. Entre las variadas causas de mastitis (inflamación del tejido mamario) la primera es, evidentemente, estar dando de mamar o produciendo leche; como muchas madres lactantes saben, el riesgo está ahí, y evitarlo forma parte del catecismo del ganadero responsable de cuidar de 20, 50 o 500 vacas lactantes. Entre las numerosas causas que la provocan tenemos lesiones en las ubres, suciedad, exceso de ordeños o un mal funcionamiento del sistema de ordeño (este último sí que puede considerarse estrés mecánico).


Aún en el caso de que el ganadero fuera un desalmado al que le importa un pito el bienestar de sus vacas, sería un perfecto inútil, ya que tratar con antibióticos implica que toda la leche que se produzca, no solo durante el tratamiento sino también tras unos días de periodo de retirada del medicamento del cuerpo del animal, ha de tirarse, caput, no vale, ya que es completamente ilegal venderla. Eso sin contar con las mastitis subclínicas, que no molestan a la vaca pero afectan ligeramente a la calidad de la leche, la cual se paga menos al ganadero. Por tanto, si las mastitis fueran la norma en el establo, el ganadero estaría tirando leche, dinero y trabajo por el desagüe.

Pezones con solución desinfectante. Aunque es inevitable que aparezcan, las mastitis se previenen con mucha higiene, por ejemplo con solución desinfectante que evita la entrada en los pezones de organismos patógenos.


No contentos con considerar a los ganaderos inútiles y/o malvados, ignoran o incluso trivializan los aspectos más elementales del procesado de la leche. Efectivamente toda esta porquería química” (justo la misma que no tenemos reparo en utilizar en cuanto estamos malitos)  va a parar a la leche”. Pero cuando un camión cisterna cargado de leche con restos de antibióticos llega a la industria,  esta lo devuelve a su propietario para que, hablando mal, “se lo meta donde le quepa”. La leche que sí cumple con los requisitos sanitarios y de calidad, establecidos por legislación y por la propia empresa, será  “pasteurizada”  si se va a vender como leche fresca (no se matan todos los gérmenes)  o sufrirá el proceso UHT (mata más gérmenes que la otra), si va para envase de larga duración.


La leche es un producto vivo, que naturalmente tiene microorganismos procedentes del entorno de la ubre, algunos potencialmente más peligrosos que otros, pero afirmar que se pasteuriza “para que no nos muramos en el acto” es, coherentemente con el título del artículo, elevar a la leche cruda a la categoría del cianuro.


¡¡¡  cuidado con lo que haces Heidi !!!


Para terminar nos cuenta que “El resultado (…) es un líquido blanco con mayor o menor nivel de grasa pero con 0 valor nutricional, al que hay que añadir posteriormente todas las vitaminas, calcio, omegas… para que alimente algo” , y las proteínas, el calcio y demás nutrientes, ¿podrían explicarme exactamente en qué momento desaparecen ?. Francamente, me parece que en estos temas el autor tiene un lio fenomenal, y le animaría a meterse en el Blog de Gominolas de Petróleo o en el del Nutricionista (o cualquier otro blog de nutrición y alimentación mínimamente serio), busque por “leche” y se ponga a documentarse un rato. 


Y, cómo no, la propuesta (sospechosamente vegetariana), cambiarse a leches vegetales, como si en la producción vegetal no se utilizaran pesticidas o fungicidas y fuera todo maravilloso, como muestra la ilustración que acompaña al artículo. Es curioso y sintomático que a la soja le pongan pegas por “todo el tema de transgénicos” y por las flatulencias más que por la posible influencia en determinados consumidores de sus abundantes fitoestrógenos (sustancias de origen vegetal muy similares a hormonas femeninas) .


Leche de vaca, caca, y "leche" de almendra , buena.