El pasado cinco de junio, el Día Mundial del Medio Ambiente, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación) y el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente) volvieron a insistir en la lucha contra el desperdicio alimentario, en su campaña “Think. Eat. Save”. Y razones no les faltan.
Este vídeo del canal del PNUMA en YouTube resume estupendamente la locura del despilfarro de alimentos.
Agricultura, ganadería y medio ambiente
La relación de la agricultura con el medio ambiente se puede ver desde muchos puntos de vista que además están interconectados. La producción agrícola y ganadera necesita de tres “ingredientes” naturales básicos: agua, suelo fértil y un clima mínimamente benigno y predecible. Los dos primeros los estamos derrochando; según la FAO más del 20 % de las tierras cultivadas, el 30 % de los bosques y el 10 % de los pastizales están en proceso de degradación y han desaparecido el 9 % de las reservas de agua dulce, recurso imprescindible para beber y alimentarnos, ya que la agricultura de regadío consume el 70 % del agua dulce. Y al tercero, el clima, lo estamos “sacando de sus casillas”. La misma agricultura por ejemplo al deforestar amplias zonas de selva tropical para instalar cultivos o pastizales, o la ganadería intensiva produciendo metano (contribuye al 30 % de las emisiones de gases de efecto invernadero). Hay más impactos ambientales causados por la agricultura, pero no quiero aburriros.
El caso es que las producciones agrícolas y ganaderas per se generan un impacto importante sobre el medio ambiente; y si le sumamos el resto de barbaridades que estamos haciendo con el planeta posiblemente estemos matando a la gallina de los huevos de oro. Bueno, mejor a una gallina normal, que el oro no se come.
Gracias, Forges por tu sentido del humor. |
Hambre y despilfarro
Ya sé que es una obviedad decir que la agricultura y la ganadería nos dan de comer (y la pesca, que no se me olvida), pero, ahora que lo pienso, no a todos por igual. El hambre en el mundo es, a menudo, la excusa perfecta para determinados grupos de presión se justifiquen diciendo algo así como “sin nosotros sería imposible acabar con el hambre en el mundo”. Y que queréis que os diga, no me acaba de cuadrar del todo este argumento y me molesta bastante que intenten venderme la moto a costa de simplificar las cosas.
Según la FAO, cada año se desperdician 1,3 billones de toneladas de comida, lo que
significa aproximadamente un tercio del alimento producido en todo el mundo.
Los consumidores de los países ricos tenemos gran parte de la responsabilidad,
ya que desperdiciamos prácticamente la misma cantidad de comida (222 millones
de toneladas) que la producción neta de alimentos del África Subsahariana (230
millones de toneladas). Ya sé que el desperdicio en sí mismo no provoca el
hambre; están los gobiernos corruptos, la especulación con alimentos, el proteccionismo
por parte de Europa y Estados Unidos, el acaparamiento de tierras, la misma degradación
del medio ambiente y mil cosas más que a mi juicio explican que no es que no
haya comida, es que está muy mal repartida. No tengo del todo claro que haya
que producir más, pero sí que es imprescindible hacerlo con sentido común.
¿Cómo y dónde se desperdicia toda esa
cantidad de alimento?
A diferencia de otros países, en España no hay estudios que nos den una idea global del problema, así que “instados” por la Unión Europea, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente elaboró la Estrategia “Más alimento, menos desperdicio”, en la que encontramos información muy interesante. Para empezar, que no es lo mismo la pérdida que el desperdicio de alimentos.
A diferencia de otros países, en España no hay estudios que nos den una idea global del problema, así que “instados” por la Unión Europea, el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente elaboró la Estrategia “Más alimento, menos desperdicio”, en la que encontramos información muy interesante. Para empezar, que no es lo mismo la pérdida que el desperdicio de alimentos.
Las pérdidas de alimentos tienen un
carácter “estructural” y son más propias de regiones pobres, donde escasean los
silos adecuados para almacenar las cosechas sin que se estropeen, vías de
comunicación y almacenes adecuados para transportar y gestionar alimentos de
manera ágil, la tecnología y el personal formado, etc. Aquí se añaden las pérdidas
ocasionadas por catástrofes naturales o fenómenos adversos. El desperdicio de
alimentos es su descarte aun siendo aptos para el consumo. Es propio de los países
ricos y debería ser más fácilmente evitable.
Infografía de Bestfootforward elaborada por Anthesis Group. Está en ingles, pero los dibujos son bastante claritos. Por si acaso; aquí va la traducción: Producción (perdidas por daños mecánicos, cosechas rechazadas, vertido o abandono), Post-cosecha, manejo, almacenamiento y distribución (degradación, pobres infraestructuras, pobres condiciones de transporte), Procesado (degradación y vertidos), sistema de distribución (degradación, productos dañados, productos caducados), consumo (productos caducados, exceso de compra). |
La Comisión Europea realizó unos análisis que estimaban que en Europa se desperdician aproximadamente 89 millones de toneladas de alimento al año. España está en el sexto puesto con 7,7 millones de toneladas o 163 kilos de alimento desperdiciado por persona. Si a nosotros nos parece que tiramos poca comida, ¿ qué tirarán entonces los habitantes del África Subsahariana y el Sur y Sudeste Asiático, que están entre los 6 a 11 kilos de desperdicio al año?.
Estos análisis atribuyen la mayor responsabilidad
del desperdicio…¿adivináis a quien?... a los hogares. Si cambiáramos nuestros
hábitos de consumo, compra y gestión de alimentos podríamos evitar tirar a la
basura el 60% de lo que se desechamos actualmente. No voy a insistir mucho en
esto porque estoy un poco hasta las narices de que nos regañen siempre a los
mismos. De todas maneras aquí os dejo este documento del Ministerio de Agricultura con muchas ideas para ayudarnos a no desperdiciar
alimentos; lo cual me parece una falta de respeto hacia quien los produjo
(naturaleza incluida) y hacia quien no tiene que comer.
Volvamos al estudio, que atribuye el 39% del
desperdicio a las empresas de la producción (que hacen los pedidos a los agricultores,
imagino) pero califica estas pérdidas y desperdicios como mayoritariamente
inevitables. Entiendo que pueda ser inevitable dejar en el campo cosechas afectadas
por plagas, enfermedades o por un episodio de pedrisco; pero tienen que existir
alternativas a dejar cosechas sin recoger porque el agricultor pierda dinero al
hacerlo. No olvidemos que el agricultor no es una ONG, ha hecho ya una
inversión en semillas, fertilizantes, gasoil, horas de trabajo para sacar
adelante el cultivo, cosecharlo supone un esfuerzo más y a menudo, con los
precios que recibe siquiera cubre todos esos gastos.
Otra causa completamente evitable, diga
lo que diga el estudio, es la cantidad de comida que se desperdicia en los
triajes. En el campo y en los almacenes agrícolas se descartan productos
perfectamente comestibles pero que no cumplen con las normas de calidad
exigidas por la propia UE o por las cadenas de distribución que venden esos
alimentos. Frutas y verduras consideradas imperfectas por no tener el aspecto,
tamaño, color, peso o el contenido en azúcares establecidos. Su destino: vertedero,
pienso para animales, o en el mejor de los casos la venta en otros canales de
comercialización. Aunque el agricultor recupere algo de la inversión, el
medio ambiente sale perdiendo porque los recursos invertidos en sacar esa
cosecha y en transportarla a veces miles de kilómetros, esos no se recuperan.
El movimiento "freegan" y Tristram Stuart
¿Sabéis en qué consiste? según la Wikipedia se trata de un movimiento de gente que pretende llevar un
modo de vida no consumista, para lo cual utiliza estrategias alternativas para
vivir. Una de ellas es la recolección de alimentos que han sido previamente
tirados a la basura o descartados por estar próxima o pasada su fecha de
vencimiento. Hay mucha gente que desgraciadamente lo hace porque no le queda
otro remedio, pero el caso es que una persona puede llegar a alimentarse
razonablemente bien de esta manera.
Y Tristram Stuart, aparte de tener este "hobby" ha
escrito un libro sobre el tema, colabora en diversos medios de comunicación y ha
impulsado varias iniciativas destinadas a mostrar el despilfarro de alimentos,
como "Feeding the 5.000" o el banquete
gourmet para un centenar de ministros y personalidades que acudieron al
congreso anual del PNUMA, que se celebraba en Nairobi. El banquete incluía
1.600 kilos de verduras y fruta producidas en Kenia que no hubieran pasado el
examen de los supermercados europeos, pero que los asistentes se comieron tan
contentos.
Tristram stuart es el autor del ensayo “Despilfarro.
El escándalo global de la comida”. Un trabajo periodístico en toda regla, pero para ir leyendo poquito a poco. |
En este vídeo de la charla Ted Tristram hace mención a un agricultor con el que se entrevistó para escribir el libro. Aquí os transcribo el párrafo correspondiente, ya que ilustra bastante bien una de las múltiples caras del despilfarro: “En 2008 Hirst dejó que una cosecha entera de espinacas, que representa una inversión de 25.000 - 30.000 libras, se secara en el campo solo porque una muestra contenía unas pocas briznas de hierba inofensiva que había crecido entre las espinacas; y esto ocurrió principalmente porque había dejado de utilizar algunos herbicidas que la UE había prohibido (aunque se siguen utilizando en las cosechas importadas para el consumo en la UE)”. Como veis, es un tema es muy complejo y, para atajarlo se requiere de ciudadanos bien concienciados e informados y mucha voluntad política.
Actualización abril 2019: He actualizado los enlaces a los documentos elaboraros por el Ministerio. Desde que escribí esta entrada se han llevado a cabo discretas actuaciones de concienciación, las últimas en 2017. De ese año es este documento que muestra que apenas hemos avanzado en este sentido.
Otras entradas que te podrían interesar:
- En otros países parece que sí se lo toman en serio. Y destinan recursos e innovación para minimizar el problema. INGREDIENTES PARA UNA ECONOMÍA CIRCULAR. Y DÓNDE ENCONTRARLOS EN HOLANDA
SI NO LLUEVE EN FEBRERO, NI BUEN PRADO NI BUEN CENTENO. En esta entrada hablo de la Huella hídrica, es decir el agua necesaria para producir determinados bienes. Desperdiciando alimentos estamos desperdiciando agua.
DESPILFARRO DE ALIMENTOS. LA LOCURA DEL PRIMER MUNDO.
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Oleh
conocer la agricultura
3 comentarios
Tulis comentariosMuy buen artículo, muy completo! Acá les dejo esta nota sobre seguridad alimentaria y niveles de hambre en el mundo http://www.contextoganadero.com/agricultura/fao-intentara-medir-hambre-e-inseguridad-alimentaria-mundial
ReplyMuchas gracias por tu opinión y el enlace (he visto cosas e ideas interesantes que me pueden ser útiles). Ojalá que esa encuesta de la FAO de la que habla el artículo la lleguen a hacer y sirva para algo.
ReplyUn saludo,
Da asco ver tirar toda esa comida en Mercadona cada día porque la fecha esta a un día de su caducidad y que es perfectamente comestible. Quien es responsable?.
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